En un mundo lleno de expectativas sociales, familiares y culturales, muchas personas se desconectan de sus verdaderos deseos. ¿Te has preguntado alguna vez si las decisiones que tomas son realmente tuyas o están influenciadas por los demás? ¿Te gustaría descubrir lo que realmente quieres?
¡Hola muy buenas! ¿Cómo te va? Sabes, en consulta me han llegado varios casos en crisis existencial con la pregunta sí realmente lo que hacen o cómo viven, es lo que realmente quieren. En este artículo, quiero que exploremos las causas comunes de esta desconexión, y darte algunas estrategias prácticas para que puedas descubrir lo que realmente quieres. Ponte cómoda o cómodo y comencemos.
Causas comunes ¿Sabes lo que realmente quieres?
Muchas personas pierden de vista sus verdaderos deseos debido a la influencia de su entorno. La presión social y familiar, el miedo al qué dirán, la falta de autoconocimiento y las creencias limitantes son factores que nos llevan a vivir según las expectativas de otros en lugar de las nuestras impidiendo descubrir lo que realmente deseamos. Reconocer estas causas es el primer paso para reconectar con lo que realmente queremos. Vemos las causas más comunes:
- Presión social y familiar: Desde pequeños, recibimos mensajes sobre lo que se espera de nosotros, lo que puede opacar nuestros deseos personales. Ej. «En esta casa todos somos médicos, así que tú también debes serlo y serás uno de los mejores.» Comenzamos a sentirnos condicionados y por temor a ser rechazados por parte de nuestra familia, comenzamos a tomar roles o una vida que no queremos.
- Miedo al juicio: El temor a ser criticado o rechazado nos lleva a priorizar las expectativas de otros sobre nuestras propias necesidades. Ej. Pensamiento distorsionado. “Uff! ¿Qué pensarán de mí? Seguro que en cuanto cuente lo que realmente quiero hacer se burlaran de mí o me van a juzgar.” Cuando hay un desequilibrio en nuestra autoestima o nos dominan las inseguridades, podemos tener la tendencia a hacer aquello que aunque no queremos, lo hacemos por temor al juicio de los demás.
- Falta de autoconocimiento: No dedicamos tiempo a reflexionar sobre nuestros valores, pasiones y metas personales. ¿Realmente te has dado el tiempo y el espacio para visualizar lo que quieres y cómo te sentirías viviendo así? Si hoy te preguntan ¿Estás seguro de lo que quieres dentro de los próximos 5 años sabrías que responder?
- Creencias limitantes: Ideas como «El éxito es solo para los demás» o «Es demasiado tarde para mi» entre muchas otras, nos impiden tomar decisiones auténticas. Pregúntate ¿Qué creencias limitantes rondan por mi cabeza? ¿Cuál es la historia que me estoy contando sobre lo que soy capaz de lograr? ¿Esta idea viene de mis experiencias, de mi familia o de la sociedad?
Estrategias para descubrir lo que realmente quieres:
Vale, como te dije al principio te daría algunas estrategias. Conocer estrategias para descubrir lo que realmente quieres te permite reconectar contigo misma, tomar decisiones auténticas y vivir una vida más plena. Estas herramientas, como la reflexión sobre tus valores, la autoconciencia y la experimentación con pequeñas decisiones, te ayudan a alinear tus acciones con tus verdaderas necesidades y a liberarte de la presión externa, construyendo una relación más sana contigo misma. Pero antes de mencionarlas, quiero que veamos un caso de ejemplo que he visto en consulta.
María, una mujer de 32 años, siempre había sido una estudiante ejemplar y una profesional exitosa. Sin embargo, llegó a terapia sintiéndose vacía y confundida. Aunque tenía un buen trabajo en una empresa reconocida, no sentía pasión por lo que hacía.
Durante las sesiones, descubrimos que María había elegido su carrera porque sus padres valoraban mucho el prestigio y la estabilidad económica. Ella nunca se había permitido explorar su interés por el arte y la escritura, ya que lo consideraba «poco práctico».
Al trabajar en su autoconocimiento, María identificó que su verdadera pasión era la creatividad. Con el tiempo, comenzó a dedicar horas extras a escribir y pintar, lo que le trajo una gran satisfacción. Finalmente, decidió hacer una transición profesional hacia el diseño, un campo que combinaba sus habilidades prácticas con su amor por el arte.
Este cambio no solo la hizo sentir más realizada, sino que también le permitió reconectar consigo misma.
Este es solo un ejemplo de los muchos que pueden haber, puede ser a nivel profesional pero también a nivel personal. Venga, ahora si veamos algunas de las estrategias que puedes poner en práctica.
- Reflexiona sobre tus valores: Haz una lista de lo que es realmente importante para ti (libertad, amor, crecimiento, etc.) y evalúa si tus decisiones están alineadas con esos valores. Lee este artículo «Valores Universales: Cuáles son y para qué sirven.»
- Pregúntate «¿Por qué?»: Antes de tomar una decisión, cuestiona si lo haces por ti o para cumplir con las expectativas de otros. Esta “simple” pregunta creeme que tiene mucho poder.
- Experimenta con pequeñas decisiones: Empieza con elecciones simples que reflejen tus deseos, como elegir un pasatiempo o decir «no» a algo que no te apetece. ¿Qué te apetece hacer el día de hoy? ¿Qué cambio te gustaría conseguir?
- Practica la autoconciencia: Dedica tiempo a meditar, escribir un diario, siempre recomiendo a mis consultantes llevar un diario terapéutico, la escritura tiene mucho poder o simplemente escuchar tu intuición. Relajate, sientate donde estés y escucha tu intuición. Lee este artículo «Escritura terapéutica: El poder sanador de la expresión escrita.»
- Busca apoyo profesional: Y por último, busca la ayuda de un terapeuta. Los terapeutas podemos ayudarte a explorar tus emociones y creencias, guiándote hacia una vida más auténtica, en consulta siempre tendrás un espacio seguro donde puedes expresar todo lo que piensas, sientes o te preocupa sin temor a juicios.
Estas son algunas de las estrategias que te comparto por ahora, pero hay muchas más y varían dependiendo de cada persona. Lo importante es dar el primer paso.
¿Te identificas con la historia de María? ¿Sientes que estás viviendo según las expectativas de otros y no según tus propios deseos? ¡Agenda una sesión conmigo hoy mismo! Juntos trabajaremos para que puedas conectar contigo misma y tomar decisiones que te lleven a la plenitud.
Cuídate mucho y recuerda que estoy para ayudarte. ¡Hasta pronto!